El verano es largo y caluroso en Granada. La ciudad se queda medio vacía y es difícil mantener durante los meses de Julio y Agosto las energías suficientes para continuar con las actividades del resto del año. Por eso, este pasado 12 de Octubre tuvimos allí un sencillo encuentro para orar juntos y recordar porque estamos juntos y lo que hacemos. Hablamos de la importancia de la comunidad en nuestras vidas y de como eso se materializa en nuestro compromiso comunitario y el servicio a los demás. Bemi, la responsable de Granada y algunos de los responsables de los ministerios explicaron algunas de estas cosas. Todo con la idea de retomar el pulso para el nuevo año y encararlo con ilusión y energías.