“La voz spoiler es un anglicismo que se usa con el sentido de ‘revelación de detalles de la trama de una obra de ficción’. En español, se recomienda usar en su lugar destripe (de destripar ‘anticipar el desenlace de una historia a quienes no lo conocen’). También se puede emplear la adaptación, ya documentada, espóiler”.
Cuando nos acercamos a estas fechas me viene a la mente mucho la palabra “spoiler”. ¿Por qué? Porque lo mismo me suele pasar cuando alguien me explica que ha ido a ver una película y me cuenta todo lo que sucede desde el inicio hasta el final. Por mucho que sepa, conozca de la Cuaresma, la Pasión, Muerte y Resurrección…. Da igual, puedo tener mucha información, conocer muchos aspectos importantes sobre ello… pero, ¿lo mejor qué es? vivirlo y experimentarlo.
Sobre la Cuaresma poco “destripe” (recomendación de uso de la RAE en lugar de spoiler) podemos hacer ya, pero sí que nos centraremos para poder experimentar y vivir los días que tenemos por delante.
Durante la Semana Santa no solo recordamos la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, sino que la liturgia es un “memorial sacramental”, es una actualización real del “misterio” que celebramos. Jesús viene de nuevo por y para nosotros, para que esa Pasión Muerte y Resurrección se dé en nuestro corazón.
Tenemos que aprovechar estos días para abrir nuestro corazón al Señor, pedírselo, que sea Él el que lo haga. Decirle que queremos descubrirle, que Él se nos muestre. Que nos ayude con nuestras cruces, nos las muestre para poderlas entregar y que Él las pueda utilizar.
También es un buen momento para experimentar que Dios nos quiere con nuestras miserias y que a pesar de ellas, libremente se entrega por nosotros, ese Amor tan extremo identificarlo y hacer lo mismo por los demás, saber acoger al otro como hijo amado por Dios.
Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.
(Jn 13, 14)
Buscar la intimidad con Jesús, reclinarnos sobre Él como el discípulo amado. Retirarnos y velar con Él, acompañarlo en la oración por el dolor y el pecado en el mundo. Que el Espíritu Santo nos transforme y nos ayude a actualizar y a revivir todo lo que en estos días Jesús vivió con sus discípulos.
Entonces vino a sus discípulos y les dijo: Dormid ya, y descansad. He aquí ha llegado la hora, y el Hijo del Hombre es entregado en manos de pecadores.
(Mt 26, 45)
Contemplar que “es por mí”, “se entregó por mí”. Si lo acogemos nos llevará a la vida eterna. Pedir estos días que nos sumerja en su amor, en su victoria definitiva, no hay situación de muerte que tenga la última palabra. ¿De qué forma actualizo hoy su Resurrección?
Y dejarnos acompañar por María, sabiendo que ella junto al discípulo amado estuvieron al pie de la cruz. María supo responder a la misión que Dios le encomendó, que sepamos responder a la llamada de Dios con la autenticidad y entrega de María.
Estaban junto a la cruz de Jesús su madre, y la hermana de su madre, María mujer de Cleofas, y María Magdalena. Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo. Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa.
(Jn 19, 25-27)
Durante estos días tenemos la oportunidad de participar de procesiones, retiros, celebraciones… que podamos vivirlo desde el silencio interior e intimidad con Dios y no como meros espectadores exteriores.
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