Servicio internacional para las realidades carismáticas
El pasado 19 de enero Guada y yo acudimos en representación de Fe y Vida al primer encuentro de CHARIS en España. CHARIS, creado a instancias del Papa Francisco, pretende ser un servicio internacional para todas las realidades carismáticas existentes.
El día comenzó con una oración de alabanza, que sin duda es una de las señas de identidad comunes a todos los grupos que allí asistimos. Posteriormente, se realizó una presentación de todas las realidades carismáticas que respondimos al llamamiento para este primer encuentro. Acudimos representantes de la Renovación Carismática Católica de España (RCC), la Renovación Carismática Católica en el Espíritu (RCCeE), Comunidad de Siervos de Cristo Vivo, Comunidad de Caná, Comunidad de Alianza Israel, Fraternidad de Familias Invencibles, Escuela de Evangelización San Andrés y nosotros, la Comunidad Fe y Vida. El llamamiento fue más amplio, pero algunos grupos no pudieron asistir al encuentro.
Vocación de servicio
Los responsables de poner en marcha CHARIS en España, Óscar Puebla y Lázaro Iparraguirre, nos explicaron en qué consistía exactamente este proyecto promovido por el Papa: No se trata de una asociación de fieles ni de una federación de comunidades, sino de un nuevo servicio único que beneficie a todas las expresiones carismáticas de la Iglesia. CHARIS tiene personalidad jurídica pública y actuará en nombre de la Iglesia, pero se constituye como un cuerpo de servicio, no de gobierno, por lo que no ejercerá autoridad sobre las realidades que de él participen. Se trata principalmente de un órgano que promoverá la comunión entre las distintas realidades carismáticas. Sus servicios se centrarán en:
- Promover la comunión.
- Proporcionar información y asesoramiento.
- Proporcionar formación y capacitación.
Tras esto, los asistentes firmamos un acuerdo de adhesión a CHARIS, por el cual se creaba el Servicio Nacional de Comunión en España y acordamos quiénes serían los primeros cinco representantes, que tendrán la tarea de ponerlo en marcha. Finalmente, concluimos el encuentro con una Eucaristía, la mejor expresión de la unidad entre todos los grupos allí presentes.
Tender puentes
Durante el encuentro también pudimos compartir con hermanos de otros grupos, algunos de ellos viejos conocidos. Fue también una oportunidad para hablar del carisma de Fe y Vida, especialmente en lo referido a la evangelización y el ecumenismo.
Sin duda, CHARIS representa una oportunidad para tender puentes y crear sinergias entre tantas realidades eclesiales que muchas veces se encuentran aisladas. ¡Os animamos a orar por ello!
Guada y Amador
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