Este fin de semana nuestro ministerio de música y otros hermanos han tenido el privilegio de juntarse para comenzar un nuevo proyecto que hacía tiempo llevábamos en el corazón: pasar dos días grabando unas canciones   en directo. No somos profesionales pero nos gusta soñar con Dios a lo grande. Dios  regala talentos y los une en un determinado momento para un objetivo común. Con esta iniciativa buscamos compartir nuestra forma de orar a través de la música que es una de las maneras que tenemos de relacionarnos con Dios. Ojalá esto pueda ayudar a otros a tener un encuentro personal con el Señor y serles útil en su vida de oración.