Este artículo irá enfocado a hablar del grupo de jóvenes de la comunidad en Cantabria, cuyo núcleo solía ser el de mayor número de jóvenes hasta hace bien poco, pero quizás convenga hablar de los de los otros grupos en otros artículos más adelante. De momento nos centraremos en el pionero.

Actualmente, y debido a la cantidad creciente en número de integrantes, lo que de primeras era solo un único grupo de jóvenes ha tenido que dividirse en dos subgrupos: uno para jóvenes de 14 a 18 años y otro de 18 hasta los 25 aproximadamente, puesto que se contemplan excepciones.

El grupo surge como respuesta a todos aquellos jóvenes que están interesados en la comunidad o están empezando a dar sus primeros pasos como cristianos, con la libertad de que son ellos los que deciden si quieren estar en él y no sus padres. Es importante hacer hincapié en esto puesto que muchos de los jóvenes que ahora forman este grupo parten de que sus familias son ya miembros de la comunidad y hasta cierto punto ellos habían estado asistiendo por voluntad de sus padres. Por ello, el grupo de jóvenes tiene como finalidad abordar la fe cristiana y ayudarles a decidir qué es lo que quieren para sus vidas.

Aunque ambos grupos están dirigidos por la responsable de jóvenes nacional, Dolos, el grupo de 14-18 es el que tiene reuniones presenciales y semanales. Como se da la situación de que a muchos de estos jóvenes los hemos conocido a través del encuentro de jóvenes internacional que realiza Fe y Vida en verano, IMPACTO, para muchos es su primer contacto con la religión, por lo que se suele invitar a las reuniones a personas de la comunidad con más recorrido en la fe para que compartan su testimonio. Se procura siempre que el ambiente sea cercano y que todos se sientan acogidos y escuchados. También se realizan con ellos salidas para que conozcan experiencias como otras comunidades cristianas o encuentros nacionales.

Por otro lado, la continuación de todo esto es el grupo de jóvenes adultos. La mayoría de nosotros comenzamos hace unos cuantos años y a día de hoy tenemos mucha relación con la comunidad e incluso formamos parte de algunos ministerios. Si bien es cierto que mucha de nuestra formación la obtenemos de otros medios de la comunidad como células, acompañamientos o asambleas, este grupo ha cogido mucho valor en cuanto a nuestras relaciones personales y lo que compartimos. Los que lo formamos somos personas cercanas entre sí y aunque vivimos situaciones diferentes ya sea por trabajo, estudios o por vivir fuera, procuramos tener reuniones virtuales frecuentes donde compartir cosas que nos haga crecer espiritualmente y se puede decir que, por el momento, además de hermanos en la fe somos amigos. Tal es así que este año pudimos acudir a la boda de una pareja encantadora a la que conocimos gracias a las reuniones online que trajo la pandemia.

Como responsabilidades, algunos forman parte de ministerios dentro de la comunidad, se van de misión a congresos internacionales como el ENC Gathering y participan en eventos de jóvenes aunque ahora ya quizá buscando servir y aportar en lugar de recibir. Otros participan en movimientos como Alpha, donde pueden ayudar a otros y seguir aumentando su formación como cristianos.

Espero que esto os haya servido para haceros una idea de cómo es este ministerio entro de la comunidad y cómo va creciendo y evolucionando la situación de los jóvenes de Fe y Vida en Cantabria.